Gracias a Carmen, he tenido la oportunidad de hacer pan gallego (o acercarme), con la Fariña que me regaló, también llamada harina del país. Consultando su receta con masa madre y la que propone Xavier Barriga en su libro, esto es lo que salió del horno.
El pan gallego, es un pan con alta hidratación, entre el 85% y 87%, más que la ciabatta incluso. Mientras iba añadiendo agua, pensaba, ufff, esto va a ser complicado baby, pero al final, no fué así, como bien dice Manel, el secreto está en la fariña.
Utilicé 300 gr de masa madre, 350 gr de harina de trigo, 150 de fariña, 10 gr de sal, 400 gr de agua, que fui incorporando poco a poco a la masa.
Como os digo, al final, el amasado no fue tan difícil. Lo peor, la moña, le faltó un poco de gracia, ya la iré perfeccionando, (por cierto, se coloca justo en el momento de hornear).


Con una fermentación larga, 4 horas en el primer levado, con sus respectivos pliegues y 2,30 h en el segundo. Sin dudarlo, una masa tan líquida, directa al banneton.

Y aquí está, una miga muy húmeda y unos agujeros enormes e irregulares Acompañado de un lacón con pimentón y patatas, fue la cena estrella de la semana.

Ahora nos falta la empanada y una escapadita a Galicia para probar sus panes ;-)